lunes, 1 de agosto de 2016

Halloween

Pastel de calabaza:
  • kg. y medio de calabaza pelada   
  • 150 gr. de harina
  • 50 gr. de mantequilla
  • 50 dl. de nata
  • 6 huevos
  • 1 l de leche y una taza de azúcar.
    Cocina la calabaza al vapor y hazla puré. Mézclala con todo lo demás. en un bol con la batidora. Hornéalo en un molde enmantequillado 50 minutos apróx. a 350 grados F.
  • Espolvorear con azúcar glass y adornar con castañas caramelizadas y semillas de granada.
- En las pastelerías de los pueblos,  hay que aprovechar cualquier festejo u acontecimiento en el calendario para hacer alguna creación especial, y animar a la gente: ya sabe: A salir, a festejar, a comprar... -le expliqué a una Ms Marple aún dormida. Me fijé en su cabello plateado, con un rulo rosa colgando detrás de la oreja. Cualquiera le decía nada. Ms Marple era imprevisible, y era conveniente tenerla contenta. Cualquier gesto, o corriente de aire la contrariaba, no sería yo desde luego, el que le advirtiese de su descuido.
- ¿ Y  qué sorpresas nos tiene preparadas para este año, ? Dígame Tom... ¡estoy intrigadísima!
- He comprado las mejores calabazas del condado, y me dedicaré en cuerpo y alma a crear mi famoso pastel de Halloween, y mis " huesos de santo" con cilantro y canela. ¿ Apruebo o no apruebo Ms...?
  Me pidió un café bien cargado, y sacó un bloc de notas  con  tapas de color bronce, con una linea roja oscuro. Anotó algo, que no llegué a ver. Con la disculpa de servirle el café con unas galletas de nata y nuez, me acerqué a la mesa, e intenté leer lo que había escrito, pero su caligrafía angulosa y huesuda cómo ella, era ininteligible. Sólo pude averiguar unas palabras:"Castillo" y "Brenda a las 6".
  Sería tiempo perdido preguntarle cuáles eran sus planes del día, porque eso nunca se debe preguntar a una detective jubilada, y apartada del ruidoso mundo. Tendría que emplear, cómo siempre el tacto y la amabilidad para sonsacarle algo.
- Dígame Ms Marple... ¿ Acudirá a la fiesta de inauguración del castillo convertido en hotel de los Jackson... "el Castillo de Niebla"?

- ¡Por supuesto que sí! No me lo perdería por nada del mundo... pagaría por entrar... Sabe que nadie pisó allí desde lo de la pobre Berta? oh... perdone... no quise importunarle...
  Estaba claro que Ms Marple no estaba de buen humor aquella mañana. Recordar a mi triste y antigua prometida no había sido muy acertado por su parte, más disimulé e hice cómo que su recuerdo no había removido en mí ciertos sentimientos de amor y dolor de mi juventud. Continué cómo si nada:
- Habrá que ir disfrazado... ¿ Irá usted...?- Me atreví a preguntarle.
- ¡Oh! Pues claro... haría cualquier cosa con tal de volver a aquél lugar...  ¿Sabe la maldición que pesa sobre los que lo habitan?
- Por Dios Ms... ¿ Usted también cree en esas brujerías?
   La lluvia fina había comenzado a caer con más insistencia. Cerré las cortinas de los ventanales del comedor y tan sólo  dejé abiertos  los de enfrente del mostrador para que entrase algo de luz en la estancia.. Encendí la chimenea, con los últimos troncos del cobertizo, ahora vacío. Entonces recordé que debería darme prisa para  cumplir con el encargo de los Jackson de medio centenar de pasteles de calabaza para el evento, y, que eso me salvaría de solicitar  al menos durante un mes, otro crédito al banco. Sólo de pensarlo me entraban escalofríos.
  Ms Mrple comenzó a leer el periódico del día,  y creyendo que estaría más distraída, ataqué de nuevo.
- Y quién la ha invitado a usted, Ms...?
- Oh Tom... parece mentira  para usted... ¿ No sabe que yo soy íntima amiga del ama de llaves... de  Sophie?
- ¿ De la abuela de...?
- Sí... de la abuela de Berta y Brenda... las mellizas...  El caso quedó sin resolver, un enigma... pobre chica, a punto de casarse... ¡Oh! lo siento Tom... Quizá le traiga malos recuerdos regresar allí...
- Es Halloween Mis Marple. Han pasado cinco años, y la vida sigue, y yo he de entregar mi encargo...-  espeté lo más tranquilo que pude - ¿no cree que debemos olvidar, pasar página ya? Este viejo pueblo es axfisiante.
- ¿ Cómo olvidar Tom? ¿ No comprende que yo llevé el caso, y no pude darle una explicación convincente a la abuela de la joven, que no pude resolverlo... mi último  trabajo  antes de jubilarme y se me escapa de las manos... ¡ Yo tenía una reputación!  ¿Sabe?
  Y entonces la puerta se abrió... y apareció ella. Cómo si esos cinco años no hubiesen pasado por sus carnes, firmes, prietas y estupendas,  enfundada en  un traje de dos piezas de cuero negro, con salones a juego. Toda la sala se giró para mirarla. Ms Marple se levantó y la abrazó.
  Todos sabíamos a lo que había venido, porqué había regresado a  este pueblo envidioso y ojerizo, que no dejaba prosperar a nadie, que no perdonaba la fortuna, ni la belleza, ni la  felicidad.
  Había regresado para recuperar lo suyo, y vaya si lo había hecho. El viejo Ted Jackson no estaba para muchos trotes, pero seguía siendo un mujeriego fanfarrón. Brenda estaba aún de muy buen ver, y ya se sabe, era cuestión de tiempo que camelara al viejo Ted. Ahora ella conducía su vieja furgoneta, administraba  sus  cuentas, y le había convencido para reabrir el hotel, en una fiesta por todo lo alto. El viejo castillo de Niebla,  que por ley le hubiera pertenecido a su hermana  Berta. 


  

1 comentario:

  1. Hola Celia:

    Cómo estás de productiva y creativa este mes!!! qué bien.

    me gusta mucho todo, tienes mucha imaginación y no es fácil escribir así que sigue con ello.

    Un abrazo.

    Pilar.

    ResponderEliminar